Un cartel o rótulo publicitario debe presentar un correcto equilibrio de los elementos que contiene, donde imágenes y textos presenten una línea de comunicación con el cual se dirija de un punto de información a otro.
Se estima que siete segundos es el tiempo máximo en que un cliente puede verse impactado por el diseño y el mensaje del soporte publicitario.
Estos son algunos elementos que debe tener un rótulo:
Impactante:
que destaque en el entorno y capte la mirada del cliente, que se sienta atraído por si ofreces una propuesta visual impactante.
Sencillo, fácil de comprender:
debe asociarse rápidamente con el producto, por lo cual aquí juega un papel importante las imágenes. Seleccionar una excelente foto es indispensable para conseguir asociar el soporte publicitario con el producto o servicio ofrecido a los clientes.
Además, el texto debe ser breve y directo, inteligible y relacionado directamente con la imagen: cuanto menor sea el contenido, mejor. Un mensaje claro y directo se hace necesario para ser competitivo.
Colores llamativos:
el color es determinante en la publicidad exterior, donde se debe buscar colores contrastados que destaquen del entorno. Es decir, el color del texto debe encontrarse contrastado con el color de fondo; si el fondo es oscuro, se debe usar letra clara y viceversa.
Artículo creado con información de rotulowcost.es.